Hace mucho más de 4 mil años que los hombres sabios de la Antigüedad en China (Sheng Ren) observaban el Cielo y la Tierra y los cambios que en la Naturaleza se generaban de forma cíclica y, como reflejo del Cosmos, al que todo tiene inclinación a completarse, a realizarse ahora madurar, llegaron a la conclusión de que el verano representaba el periodo estacional en el que la energía Yang lograba la máxima expansión (Taiyang): los días se volvían mucho más largos y lumínicos, el tiempo era mucho más caluroso e inclusive seco, la mayor parte de las plantas terminaban de florecer medrando hasta lo prominente y los árboles maduraban sus frutos. Este movimiento, esa energía de circulación ascendiente, fue representada por estos hombres sabios con el elemento Fuego que, simbolizado con el Astro Rey, el Sol, nos aportaba vida, calor y energía.
Para el hombre viejo el elemento Fuego reflejaba el cariño, el entusiasmo, el deseo, la alegría, la apertura del Corazón y la claridad mental (Shen); esto es, los pasos, las energías correctas o fuerzas primordiales para prenderse, para hacer todo emprendimiento o acción y que esta se desarrollase absolutamente, logrando el esplendor y la luz. Por esta razón, los sabios de la antigüedad en China concibieron el verano como el periodo mucho más propicio para la expansión, el movimiento y la comunicación. Afirma el Primer Canon del Emperador Amarillo, Huang Di Neijing (S.III a.c.), que “en primavera y verano, la energía Yang de la Naturaleza medra y se hace más fuerte y los seres vivos asimismo tienen este desarrollo ; por consiguiente, en este periodo, el hombre debe resguardar la circulación del espíritu. Es requisito efectuar ocupaciones de exteriorización para dar de comer a Yang, que se posiciona en el exterior, y para beneficiar los procesos de desarrollo y avance del interior del organismo. Y este es el término de alimentar Yang a lo largo de la primavera y el verano según el procedimiento de los hombres sabios de la antigüedad (Sheng Ren) para dar de comer la vida (Yang Sheng Zhi Dao)
¿Qué síntomas se muestran con inconvenientes digestibles?
En todo el producto ahora hemos nombrado varios de los síntomas que acostumbran a tenerse en el momento en que un individuo padece de inconvenientes digestibles. Pero aún de esta forma los remarcaremos y además de esto vamos a llamar a ciertos mucho más.
- Dolor estomacal.
- Abdomen hinchado desde primera hora de la mañana, que se marcha acentuando conforme va pasando el día.
- Digestiones muy pesadas y muy lentas.
- Estreñimiento.
- En varias oportunidades se tienen la posibilidad de tener náuseas e inclusive vómitos.
- Padecer de ardor y acidez en el Estómago.