En la década de 1960, un médico llamado Lawrence L. Weed describió por primera vez el concepto de registros médicos computarizados o electrónicos. Weed describió un sistema para automatizar y reorganizar los registros médicos de los pacientes para mejorar su utilización y, por lo tanto, conducir a una mejor atención al paciente.
El trabajo de Weed formó la base del proyecto PROMIS en la Universidad de Vermont, un esfuerzo de colaboración entre médicos y expertos en tecnología de la información que comenzó en 1967 para desarrollar un sistema de registro médico electrónico automatizado. Los objetivos del proyecto eran desarrollar un sistema que proporcionaría datos de pacientes oportunos y secuenciales al médico, y permitiría la recopilación rápida de datos para estudios epidemiológicos, auditorías médicas y auditorías comerciales. Los esfuerzos del grupo condujeron al desarrollo del registro médico orientado a problemas, o POMR. Además, en la década de 1960, la Clínica Mayo comenzó a desarrollar sistemas de registros médicos electrónicos.
En 1970, el POMR se utilizó por primera vez en una sala médica del Medical Center Hospital of Vermont. En ese momento, la tecnología de pantalla táctil se había incorporado a los procedimientos de entrada de datos. En los años siguientes, se agregaron elementos de información sobre medicamentos al programa central, lo que permitió a los médicos verificar las acciones, dosis, efectos secundarios, alergias e interacciones de los medicamentos. Al mismo tiempo, se diseñaron planes de diagnóstico y tratamiento para más de 600 problemas médicos comunes.
Durante las décadas de 1970 y 1980, varias instituciones académicas y de investigación desarrollaron y perfeccionaron varios sistemas de registros médicos electrónicos. El sistema Technicon se basaba en hospitales y el sistema COSTAR de Harvard tenía registros de atención ambulatoria. El sistema HELP y ‘The Medical Record’ de Duke son ejemplos de los primeros sistemas de atención hospitalaria. El registro Regenstrief de Indiana fue uno de los primeros sistemas combinados de pacientes hospitalizados y ambulatorios.
Con los avances en las aplicaciones informáticas y de diagnóstico durante la década de 1990, los sistemas de registros médicos electrónicos se volvieron cada vez más complejos y más utilizados por las prácticas. En el siglo XXI, cada vez más prácticas están implementando registros médicos electrónicos.