Los nazis cooperaban con científicos de las mejores universidades de Alemania y proseguían lo que entonces se consideraba el procedimiento científico para efectuar una ciencia “monstruosa, malvada y no ética”.
Varios de estos médicos se suicidaron tras la guerra, o escaparon, como Mengele. Pero otros fueron juzgados en el Juicio de Médicos de Nuremberg. ¿Por qué razón es esencial este juicio?, se pregunta el especialista, y responde: «Pues de ahí salió lo que tiene por nombre Nuremberg Code, las leyes sobre de qué forma se tienen la posibilidad de llevar a cabo ensayos con humanos.»
Theodor Morell
Morell nació en 1886 en un pueblo alemán llamado Tarsia. Estudió medicina y se especializó en ginecología y urología por ejemplo ramas. Ahora en su juventud ganó popularidad como “venerólogo” por las inyecciones de glucosa que agradaba realizar a sus pacientes
En esta temporada resultaba singularmente común la experimentación a partir de la inoculación de distintas substancias que, a por medio de su inyección intravenosa, se pensaba que podrían asistir al cuerpo a progresar su aptitud y vitalidad.
Tráiler
El permiso informado a pacientes
“Lo que le ocurrió a las 400 personas en Tuskegee las formó la control el planeta el día de hoy”, apunta el respetado médico y también estudioso de origen irlandés y vivienda en USA. El permiso informado antes de formar parte en prácticas experimentales y las regulaciones bioéticas de los ensayos con humanos procuran resguardar hoy en día los derechos y seguridad de los pacientes. No obstante, no llegan para evitar totalmente los pésimos hábitos, insiste Tobin.
No se habla solo del misterio. El ensayo de Tuskegee se realizó, orgullosamente, en frente de toda la red social científica. “Durante 37 años se han publicado mucho más de 15 trabajos sobre Tuskegee en gacetas científicas reputadas. Ningún científico ni médico de todo el mundo publicó un comentario o una crítica sobre la ética del ensayo”, recuerda Tobin. Debió intervenir un trabajador popular y un periodista del New York Times a fin de que los ensayos con sífilis se detuviesen. Tobin demanda en este momento que la lección de Tuskegee no sea olvidada.
MEDICINA Y también INVESTIGACIÓN
Estimando que el ejercicio de ocupaciones “médicas” fué descrito desde los tiempos de la raza humana, es simple admitir que nuestra profesión mantuvo por norma general una actitud mucho más bien pasiva y poco eficaz, mucho más encargada de detallar y acompañar el curso espontáneo de las patologías, con intervenciones primordialmente paliativas, para calmar y consolar a los enfermos y sus deudas que a curarlas con intervenciones eficientes.
