Entre las percepciones que mucho más me cambiaron como médico desde el momento en que soy madre fué el instante de recetar una medicación. Antes de ser madre, recetaba la medicación sin meditar bastante alén de lo que esto suponía para la familia o el niño. Desde el instante en que soy madre, lo receto igual, claro, pero me sé poner a la perfección en los zapatos de esta familia.
Pues ofrecer la medicación a un niño o pequeña puede ser una enorme odisea, lo sé y lo he vivido en mi piel.
¿Debo ofrecer fármacos a mi hijo/a pequeño/a?
Lo primero a tomar en consideración es que más allá de que los pequeños se ponen enfermos de la misma los mayores, el régimen para ellos no es exactamente el mismo. Ya que su cuerpo y órganos no están desarrollados completamente y no tienen la posibilidad de aguantar varios de los fármacos.
De ahí que la recomendación es siempre y en todo momento eludir el fármaco. Si la patología es viral o un resfriado, probamos primero con reposo y abundante líquido. Si aún de esta forma los síntomas no desaparecen, entonces es hora de conocer al médico. Pero jamás jamás, dirigir antídotos a un niño sin prescripción médica.
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Marchamos hasta el 94.
Le dejó el despejado Grealish a Rashford que probó el tiro con tuerca y no sorprendió por nada a Turner, que captura simple.
Trucos para eludir que el niño vomite el fármaco
“Hay pequeños que solo evaluar la medicina la devuelven, a otros el gusto les resulta tan desapacible que si bien procuran soportar, terminan haciéndose lo asimismo” .
Existen algunos trucos que tienen la posibilidad de eludir, en determinada medida, que ocurra esto:
Vías de administración del fármaco
- ORAL: es la mucho más frecuente y segura. Las primordiales formas farmacéuticas que se gestionan por vía oral son: comprimidos, cápsulas, grageas, medicamento, resoluciones, suspensiones y granulado. Los comprimidos siempre y en todo momento tienen que tragarse enteros, salvo que sean ranurados, puesto que el principio activo no se absorbería apropiadamente. Las cápsulas tienen que tragarse enteras, a menos que lo indique el prospecto. Para elaborar una suspensión extemporánea, es requisito añadir agua mineral hasta la marca, pero en 2 pasos; primero un tanto y agitar y llenar después con agua hasta el tamaño total. Los comprimidos efervescentes se nombran de esta manera por su formulación con un ácido y un álcali que reaccionan al disolverse en agua generando pequeñas burbujas de anhídrido carbónico que rompen el comprimido y hacen más fácil la disolución del principio activo. En el caso de fallo o sobredosificación se puede llevar a cabo un lavado gástrico en el hospital o inducir al vómito. Por contra, la absorción no es rápida y el fármaco puede padecer procesos de metabolización en el tubo digestivo y ocasionar la irritación de la pared del estómago.
- SUBLINGUAL: en pequeños es poco frecuente. La usaremos más que nada en el caso de no ingesta y viable hipoglucemia como, por poner un ejemplo, en el caso de gastroenteritis. Pondremos algo de azúcar blanco bajo la lengua para su rápida absorción (5 minutos).
- TÓPICA: el fármaco se aplica de forma directa en la región a tratar. Las formas mucho más comunes son polvo (en la actualidad solo las usaremos en los pies por el peligro de inhalación por vías respiratorias), resoluciones, cremas, lociones, geles, pomadas y linimentos. Fundamental es utilizar una cubierta no grosísima, favoreciendo de esta manera su adecuada ventilación.
- OFTÁLMICA: los fármacos se aplican de forma directa al ojo, como gotas, resoluciones, colirios y pomadas, favoreciendo una acción local. Existe absorción a nivel de la córnea. Jamás ponga en contacto el envase con el ojo para eludir contaminaciones de bacterias u otros gérmenes.
- ÓTICA: consistente en la app tópica de gotas en la oreja externa. Jamás se usarán algodones u otros cuerpos extraños puesto que facilitarían el desarrollo bacteriano causante de la infección.
- INTRANASAL: el fármaco se va a aplicar con apariencia de pomada o resoluciones (gotas y nebulizadores) actuando en la vía nasal.
- INHALATORIA: la absorción del principio activo es mediante la mucosa nasal y se administra a través de nebulizadores.
- RECTAL: el fármaco se administra vía anal a través de supositorios o enemas.